Donde quiera que se busque, cuando alguien desea saber más acerca de Puerto Morelos, encontrará la imagen de un icónico faro. Un faro que está ladeado; inclinado como evidencia de su resistencia y fortaleza ante el embate del huracán Beulah en 1967.
Foto portada: Expedia
Y no por nada se ha vuelto el ícono de este hermoso puerto pesquero, el puerto más antiguo de Quintana Roo; como las del faro, las cualidades que se puede encontrar en sus habitantes son sin duda la fortaleza, integridad y permanencia.
Puerto Morelos es un lugar digno de visitar cuando andas por Cancún, Playa del Carmen, Tulum o cualquier punto de la Riviera Maya, no sólo por los variados atractivos que se pueden encontrar dentro y en su cercano derredor, sino porque siempre se ha caracterizado por brindarse a la calidad de vida y bienestar de sus ciudadanos y visitantes. Es por eso que su gente continuamente se ocupa de mejorar la calidad de la experiencia Portomorelense.
Este puerto, rodeado de manglares y de mar, es un lugar lleno de naturaleza y preocupación por el cuidado de sus recursos naturales.
Puerto Morelos es una comunidad realmente comprometida con la conservación, no sólo por la investigación continua llevada a cabo a través de la Unidad Académica Puerto Morelos del Instituto de Ciencias del Mar de la UNAM o la protección de la flora regional en manos del Jardín Botánico Ecosur y la labor de conservación de la fauna endémica que se lleva a cabo en Croco Cun Zoo, sino porque es la primera comunidad que solicitó al Gobierno Federal que el mar que se encuentra frente a ellos se declare área natural protegida.
Y así fue; hoy Puerto Morelos cuenta con el Parque Nacional Arrecife Puerto Morelos , orgullosamente conocido también como el “Gran Arrecife Maya”, que forma parte de la segunda barrera arrecifal más grande del mundo. ¿No es Puerto Morelos muy afortunado? Sin duda. Este arrecife se encuentra tan sólo a 500 metros de la playa; explorarlo cuidadosamente en un tour de snorkeling certificado es un deleite.
Esta barrera de coral es también el motivo por el que las playas caribeñas de Puerto Morelos son de aguas calmas y pacíficas, lo que lo hace un destino gratificante y tranquilo para familias, niños, jóvenes, abuelitos, buzos, exploradores, amantes de la naturaleza y viajeros de cualquier oficio y nacionalidad.
Actualmente Puerto Morelos presenta un crecimiento turístico bastante importante pero a pesar del número creciente de lugares de alojamiento, permanece la tranquilidad que le caracteriza.
Es prácticamente posible caminar el pueblo de cabo a rabo, o bien, rentar una bicicleta y sentir la brisa del mar mientras lo exploras y disfrutas del avistamiento de la fauna endémica en cielo y tierra; después meterte a la playa que encuentres en tu camino y disfrutar la hora de la comida en restaurantes locales de mariscos siempre frescos.
Puedes disfrutar de tardes y noches bohemias; apreciar desde las bancas del malecón el imponente “arte efímero” de las esculturas de arena que José Luis González, escultor venezolano, hace en la orilla de la playa, o bien, pasear por el parque central donde se puede platicar, disfrutar la brisa, y contemplar el mar.
Visitar el mercado maya de artesanías, tomarte un café, visitar la librería, comer pizza artesanal, carnes uruguayas o tener una noche llena de música y futbolito en el pequeño bar más famoso del pueblo son también parte del encanto.
Durante el día puedes explorar y disfrutar de los numerosos cenotes de diversos tipos (a cielo abierto, semiabiertos y subterráneos o en gruta) que hay alrededor de Puerto Morelos, tanto dentro como fuera de la famosa Ruta de los Cenotes.
Los cenotes son maravillas de la naturaleza; en maya se les dice dzonoot, que significa “hoyo con agua”, mismos que son alimentados de corrientes y ríos subterráneos localizados en toda la península de Yucatán.
Es posible también, si tienes suerte, encontrarte a uno de los modelos con los que el artista Jason de Caires Taylor elaboró una de las afamadas esculturas del MUSA, el museo subacuático de Arte para la Conservación de los Recursos Marinos. El objetivo de este museo, localizado en las aguas frente a Isla Mujeres, es promover que, sobre estas hermosas piezas, crezcan algas marinas y corales que con el paso de los años formarán un arrecife. Este proyecto, que ya está rindiendo fruto, es realmente interesante y emotivo.
Culturalmente hablando, actualmente este puerto se está convirtiendo en una puerta importante, ya que en los últimos años ha sido la casa de festivales nacionales e internacionales de arte, de música, de cerveza artesanal y del tradicional Torneo de Pesca Deportiva.
Puerto Morelos es también un perfecto getaway para los residentes de las zonas cercanas como Cancún, un paraíso caribeño a 30 km de otro. Según su elección, aquí es grato tanto quedarse todo el fin de semana, como venir únicamente a disfrutar del día, o la noche; eso dependerá de sus intenciones.
En resumen, Puerto Morelos es encantador. Pero más encantador es el ambiente ecléctico que se respira y vive; la convivencia y armonía entre las personas provenientes de las tantas, cercanas, lejanas y diferentes tierras del mundo.
Lo verdaderamente inadmisible en Puerto Morelos, es no visitarlo.
Paulinario Yucatanensis.